A Usted
la tengo amarrada a mis anhelos
a mis ganas de sentir
a mi imperante, insustituible, indispensable, caótica y urgente
necesidad de una mínima muestra de afecto ...

A manera de resumen
comunico que estoy
contando cuanto falta para que hoy …
deje de ser hoy …

Me parto en partes, punto y aparte. De un todo sólidamente integrado me convierto en piezas inútiles por si mismas y más inútiles aun a la hora de tratar de rearmarme …
Tengo un gato que asumo como amigo, medio loco,
maullando en mi tejado. Jilgueros y gorriones que me anuncian
el amanecer en fa y si bemol respectivamente, aunque el
gorrión desafina cuando amanece de mal humor…
Tu ausencia de palabras, repuestas en monosílabos, tus breves conversaciones y tus largos silencios eran indicación de algo … y yo ya la veía venir desde lejos
“Un día, todos los elefantes se reunirán para olvidar. Todos, menos uno” (Rafael Courtoise)
Uyyy si, yo se que la palabra del título no existe, es invento mío, pero quiero contarles de una antigua y muy extendida interpretación de la Antigua Roma, hablaba de la derivación de la palabra “testificar” basada en el hecho que los hombre al momento de ser testigos de un juicio, tenían que apretarse bien el escroto, y si no se los apretaban para decir la verdad … lo que decían era falso.
Fue un 11 de febrero específicamente, y no se trataba de batir récords de velocidad, era simplemente la sumatoria de varias causas las que llevaron a los “Fab Four” a grabar “Please please me” en una maratón de un solo día.
Ridley Scott, se ha empeñado en salvar al cine de grandes dimensiones (Laurentis, Lucas, Spielberg) del olvido y ocupar las grandes salas de cine para su impacto al espectador, antes que se conviertan en centros comerciales.