
(Investigación dedicada con respeto a la afición del FAS, la que incluye a mi esposa Tania y mi hija Adriana).
Muchas veces, he hablado con amigos, fanáticos del FAS, con quienes siempre íbamos al Quiteño, a pelearnos en los FAS – Firpo, a ver quién gritaba más fuerte, y si Firpo ganaba en Santa Ana (cosa que hicimos varias veces).
Y cuando les preguntaba a mis amigos, si sabían quién había sido Óscar Quiteño, ninguno podía explicarme …
Y con todo, es una historia que siempre me apasionó es la primera (y única hasta donde llegan mis archivos) muerte súbita de un jugador en un estadio salvadoreño.
Se tejen historias, especulaciones, y con los recursos de investigación logramos tratar de echar luz sobre el tema, hablando con su hijo, doctores, historiadores, todos de Santa Ana.

Son menos de diez minutos muy emotivos y bien documentados, acerca de la previa y posterior reacción de toda una ciudad a la muerte del portero del FAS, el 13 de diciembre de 1964.

“Me deprimo, primo …” me balbuceaste al cel, y yo que soy tu primo, tu amigo, vine tan pronto como pude. Calma, Alma.
“Mirá Natalia, vos sabes como soy yo, que me conocés desde años de estar trabajando aquí en esta oficina de Gobierno, hemos visto pasar lotes de jefes, desde el finado Duarte que era una amabilidad de hombre, aunque le dijeran loco …
Aunque la mayoría de nosotros conocemos la historia del alunizaje de 1969 como parte de la misión Apolo 11, pocos conocen a Eugene Shoemaker, la única persona que fue enterrada en la luna. El astrofísico y geólogo estadounidense Eugene Shoemaker se convirtió en la primera persona en llevar sus restos a la Luna cuando el Lunar Prospector de la NASA llevó allí una parte de sus cenizas en enero de 1998.