Por amor de Dios, pocos seres vivientes tienen una vida tan desgraciada como la nuestra, o sea me refiero a los balones de fútbol profesional (ah, que usted creía que no somos vivientes?), No. 5, que venimos a parar a las patadas en torneo burocráticos de cuarta categoría.
Resulta que en la primera entrega de estos “momentos”, la semana pasada, dejábamos abierta la posibilidad de hacer una segunda parte, si les llamaba la atención, y lo hicieron, así que van cinco más uno para mayores de 18 años al final.
Revisando, porque hay algunas cosas que asumimos como ciertas, simplemente porque se nos han transmitido por narraciones, cuentos y afines, de manera verbal digamos …
Con el pasar de los años nos vamos dando cuenta de la inminente verdad, sobre como nacimos originales y moriremos siendo copias, lo digo porque recuerdo que hace algunos años acompañé a mi padre a nuestro coloso (Estadio Cuscatlán).
Escuchaba a dos vecinas hablar de jardín a jardín con un diálogo más o menos similar a éste …
- Ay si vecina, menos mal que lo peor del COVID ya pasó, yo esperaba la Pfizer, pero a más no haber
- Si pero como usted dice, lo peor ya pasó …