De todos los héroes de mi infancia, nunca fui muy adepto a Supermanes ni Batmans ni Capitanes América, aunque mi incipiente pubertad me hacía un poco “fan” de la Mujer Maravilla, por razones hormonales obvias, mi “héroe” particular era mi tío Heráclito.
Pepe Parásito, pajarraco pterodáctilo, sanguijuela del neoclásico, huele a mierda y hiede a plástico, te sangra a lo jurásico, te pone trabas y mil obstáculos, te ahorca con tentáculos, pero al Jefe le da un ósculo, en el sitio más recóndito, cada día al crepúsculo …
Saquele punta al lápiz … no, no lo tome literal, anote … Lex Luthor de Superman, el Sr. Burns de los Simpsons, Dr. Evil de Austin Powers y Mini Me también, Brainiac, Siniestro, Darkseid ….
Usted me va a decir, que no, que no puede ser, que los japoneses, son ejemplo de método, sistema, orden, puntualidad … y les robaron tanta plata, un solo hombre, y no lo han resuelto ? “Naaaaa chele, vos me estás jodiendo!”
Obviamente, soy católico practicante, no creo en la reencarnación, pero fíjense que después de escuchar tantas tonterías de “celebridades” al respecto, he sacado mis propias conclusiones, solo para divertirme.