Han vuelto a bocas de todos, bocas de inodoro y bocas de pétalo, las malas palabras … las palabras soeces de siempre, se pueden oír en labios de un funcionario, un locutor radial, un adinerado cuando a través de su banco se quiere quedar con tu dinero y el ratero cuando a través de una amenaza se quiere quedar con tu celular …
El refrán popular, denomina a aquellas fiestas, donde los invitados arrasaron con todo, la comida, la bebida, los manteles, los centros de mesa, los delantales de los cocineros y de paso le tocaron las nalgas a un par de meseras …
Porque somos, hemos sido y seguiremos siendo malinchistas desde el momento que Cristóbal Colón hincó rodilla en tierra americana y empezó a cambiar oro por espejitos, hasta el día de hoy que quienes nos cambian oro por plástico, son las grandes transnacionales financieras mundiales, todas con sus filiales en El Salvador, a menos cabo de los dos últimos bancos (aun salvadoreños) que respiran en medio de esa vorágine.
Entender la realidad de Luis Ángel Firpo en este primer semestre de 2016, requiere de dos métodos, un método cartográfico o dejarse guiar por el sentimiento …
Tantos falsos profetas, Apòstoles de la Nada, religiones raras, cultos torcidos, vienen anunciando el fin de mundo hace tanto tiempo, que ya lo tomamos a changoneta … o peor aùn, tal vez el fin del mundo ya fue y no nos dimos cuenta …
Algunos gobiernos conceden Medalla al Valor a héroes de guerra, bomberos aventados y embajadores que pasaron por el país sin robarse nada ni maltratar a sus sirvientes, pero esa medalla, a mi juicio, tiene un único verdadero dueño: aquel prehistórico hombre de las cavernas que se atrevió, a inicios de la Historia, a comerse el primer huevo.