Que sensación más insoportablemente desesperante, porque pasa, sucede, es un hecho, usted va manejando o en un carro de pasajero en las interminables trabazones de San Salvador y zas!!
Aquello de que … “Su Majestad, Señora Reina … no tenemos para darles a nuestros hijos pan!” y la repuesta de María Antonieta “Entonces dadles pasteles”, en plena vía pública de aquella ciudad de París Borbona, puede ser un mito, pero que la población parisina no la quería … es totalmente cierto.
Al respecto del inicio de este mes de febrero, mes del amor y la amistad, blablablá y todos sus objetivos comerciales, hace mucho, mucho tiempo, yo tenía una novia buena y hermosa.
Narciso Orellana, ve la luz del alba en su cantón , en el tambo con su padre, ayudándole a ordeñar vacas. Lo ha hecho toda la vida …lo sigue haciendo, es parte de él, de su vida, hábitos y costumbres …
“Nadie sabe lo que sufrimos los que nos vamos al espacio, hay mucho ruido y cohetes, pero mientras nuestros cuerpos se elevan a oh! Tan crispadas elevaciones, quedan en Tierra nuestros corazones” … así comienza a borronear previo a su vuelo a Ganímedes nuestro astronauta Apolo Apulo ….