Ya para enumerar los grandes huracanes de 1980 a la fecha, debemos detenernos, tal como lo dijimos en la entrega anterior, en una fenómenos innegable (por mucho que lo niegue Trump y los grandes emisores de dióxido de carbono), a menor escala que el suelo, cierto, pero las aguas oceánicas se calientan.
Es un hecho que, por lo general, les paramos poca bola, ya salen al final de misa, cuando el sacerdote ha hablado hasta la saciedad de temas relacionados con cualquier cosa menos con el evangelio del día, (por lo general hablan de si mismos, y buscan elevarse a vicarios aunque sea, además de organizar colectas) y una señora, voluntaria, o algún caballero con el afán de ayudar comienzan a leer los avisos parroquiales … Otros se pegan en pizarra, y son algo así como la "Gaceta de chambres del vecindario".
Siguiendo con la Historia del impacto de huracanes en épocas donde ya existían las mediciones de categorías según instrumentos de medición de presión y fuerzas de vientos (creadas entre 1880 y 1920), sus causales, y como, aquellos que causan mayor mortandad salen del listado.
El individuo no tenía cara de lunático, nada que ver con esos trasnochados que tratan de venderte cualquier cosa para seguir con su ruta de crack y efedrina … nada que ver.
Resulta, que como lo hemos postulado varias veces en este blog, hemos vivido equivocados, y en el caso de la Antigua Roma, todo es por culpa de Hollywood … básicamente.