Pensamos siempre que las más absurdas creencias las tienen los norteamericanos, les damos el mote de ser “más incrédulos”, entre ellas que los platillos voladores existen y que hay marcianos infiltrados en la Tierra, que Irak si preparaba armas nucleares, en Santa Claus, Ronald Mac Donald y Hilary Clinton.
Si pasara una vez, cada de vez en cuando, sería una maravilla, pero no es así, es el diario trajinar de nosotros salvadoreños, en la capital de nuestro país.
Hay fiestas, celebraciones, que nos hacen bailar mariposas en la panza en lo que nos acercamos a la fecha, y hay otras que provocan mariposas, pero ya conservadas en formalina, y eso es malo para la panza, por lo que te dan hasta agruras de pensar que hay que ir.
A estas alturas, en el momento que esto se escribe, los hechos son innegables … y son los siguientes:
Resulta que un funcionario de Gobierno, específicamente del Minisiterio de Infraestructura, se dio cuenta que al momento de presentar planos, algunos constructores, algunos nada más, muy pocos … no llevaban la cantidad de juegos de copias heliográficas solicitadas, por lo cual se iban, y tenían que regresar a presentar trámites.