Resulta que un funcionario de Gobierno, específicamente del Minisiterio de Infraestructura, se dio cuenta que al momento de presentar planos, algunos constructores, algunos nada más, muy pocos … no llevaban la cantidad de juegos de copias heliográficas solicitadas, por lo cual se iban, y tenían que regresar a presentar trámites.
La cabeza del fútbol salvadoreño, vive mirándose el ombligo. Eso hace las ocho (8?) horas laborales del día … nada más.
La culpa la tuvo mi madre, Ai – Nozomi, venerable anciana a quien se le metió en su obstinada cabeza de campesina japonesa, viuda, con seis hijos varones (mis hermanos), que en lugar de sembrar arroz en los pantanos, había que fabricar micro chips en la mesa del comedor.
De los casos ingratos, de las muestras de ingratitud latente que la chimbomba tiene … la combinación sedes lejanas y viajes en barco plus el sistema de disputa hasta 1950, presentan varias muestras.
Hace un par de horas, mis compañeras y yo, invitadas sin permiso a su casa, le hemos visto pasar, llevando en sus manos un veneno para hormigas (o sea, para nosotras).
En mi país, existe lo negro o lo blanco, en medio … no hay grises; existe la crítica a gritos o la indolencia generalizada, en medio … no hay opiniones racionales.