No te necesito, no, no te necesito ni siquiera la mitad de lo que tú te imaginas que te necesito.
Tu piel y toda la belleza que encierra
duerme desnuda, esta noche
entre las sábanas de mi madriguera.
-¿Vos y yo hacemos el amor o simplemente tenemos sexo? Cuestiono él.
-Creo que ninguna de las dos.
La oscuridad no le preocupa. Le preocupa la luz. La oscuridad es solamente ausencia de luz. Pero la ausencia sí le preocupa. La preocupación no. Le es indiferente. Sin embargo, la indiferencia, a Ana le preocupa muchísimo.
O sea, si vos querés saber las cosas tal cual, desde el principio, déjame que te cuente más o menos como fueron los acontecimientos que nos trajeron hasta acá …
Que estamos todos locos, es un hecho, que siempre ha habido locos lindos, locos peligrosos y locos en riesgo de entrar a la normalidad…. también.