Estimado Don Sigmund, encuéntrese donde se encuentre por disposición de designios divinos, ya sea en el cielo con Cerati o en el infierno con Mussolini, usted que se dedicó a generar toda la teoría del psicoanálisis y sus implicaciones y connotaciones sexuales … sería tan amable de responderme: que carajos es un orgasmo?
Ya nos dimos cuenta como te podés cubrir de gloria siendo un hacker de primera línea, como el joven de 22 años Marcus Hutchins, autodidacta, fanático de Pokemon, que detuvo el “ransomware” invirtiendo solo $ 10. 29 … mientras los informáticos se rompían la cabeza gastando millones,un genio !
Escuchame bobalicón, caradura de colección, buscón pero cagón, tu presencia es una obstrucción, tu ausencia es una bendición, promotor de destrucción, mártir de quinta extracción, quien te dijo que si vivimos a las patadas … los salvadoreños vivimos mejor?
Alguna vez se han puesto a pensar en el tipo de cuentos que les contamos a nuestros hijos? Son los mismos que nos contaban nuestros padres a nosotros …
Yo quería escribirles, acerca de una de las cosas que más nos gusta atesorar a los seres humanos y que, sin embargo, no da la felicidad: o sea no vamos de escribir de dinero …sino de bolsas de plástico.
- Estanislao del Carmen y del Perpetuo Socorro Maxísteles …
me podés pasar el alhuaishte por favor?
Un hombre sentado solo en la mesa de un café, junto a una ventana que está abierta, una linda señorita viene caminando por la calle, ella pasa junto a la ventana … el hombre susurra :
Porque somos, hemos sido y seguiremos siendo malinchistas desde el momento que Cristóbal Colón hincó rodilla en tierra americana y empezó a cambiar oro por espejitos, hasta el día de hoy que quienes nos cambian oro por plástico, son las grandes transnacionales financieras mundiales, todas con sus filiales en El Salvador, a menos cabo de los dos últimos bancos (aun salvadoreños) que respiran en medio de esa vorágine.
Ha llegado un deseo bastante propio,
es un deseo que dicta la piel ...
Leticio vivía desde hacía diez años con su esposa, a la que amaba con la misma intensidad que el primer día, o quizás todavía más, y con su suegra … a la que aborrecía también con la misma intensidad con la que la había venido aborreciendo todos esos años, o incluso más.