Dado que el poder emana del pueblo, y que según el art.80 de nuestra Constitución de El Salvador, dice claro “El presidente y Vicepresidente de la República, los Diputados a la Asamblea Legislativa y al Parlamento Centroamericano (todavía existe? .. Para qué ?) y los Miembros de los Concejos Municipales, son funcionarios de elección popular …
En reunión de ciudadanos, hemos decidido confesar … nos equivocamos !
Sobre todo en el área Legislativa, que ya ni siquiera representa los votos que depositamos, porque votamos por un partido y sus exponentes hoy son de otro, y otros se han vendido al mejor postor, según es tradición, por lo cual, como el poder emana de nosotros, proponemos:
CAMBALACHE ! PERMUTA ! TRUEQUE! TRANSAS ! TE DOY; ME DAS !
Cambiamos ochenta y cuatro diputados poco cultos y estudiados, bastante afectos a las burradas y hacer extensa exposición de su ignorancia, pero con almuerzo y secretarias incluidos ya pagados por el pueblo.
Un ejército de asesores por fracción legislativa, que hacen (a veces) el trabajo que los ante mencionados no hacen nunca por su incapacidad y huevonería notoria.
Un lote de plazas fantasmas para mantener partidarios, activistas, amantes, familiares y otros gustitos
Por cualquier cosa que pueda resultarnos más útil que esta resma de batracios, entre los objetos dignos del trueque proponemos:
- Sellos Trébol.
- Una tarjeta vencida de Aeromillas.
- Cinco envases vacíos de Grapette.
- Una bandera para animar partidos del Juventud Olínpica.
- Una entrada para ver el estreno de cualquier película en el Cine Caribe.
- Un vale para una cena de dos personas en El Gran Bonanza.
- Una plaza de trabajo en Radio 10 o Radio Teatro. (En la YSU inclusive).
- 10 sobrecitos de Café Listo.
- Una cédula de Identidad.
- Piezas de huesera de los aviones A-37 que compró Funes a Chile que no pudieron sobrevolar la ciudad el Día del Soldado por estar “mecánicamente poco seguros” (DNAC)
- Un par de pases para llevar a nuestros hijos a cantar a “Jardín Infantil”.
- Un palco en el Estadio del Campo de Marte.
- Una colección de discos de Camilo Sesto en acetatos de 78 RPM.
- Un diskette.
- Dos entradas con derecho a juegos gratis en Plaza Alegre.
- Un vale de compras en el Supermercado “Todos”.
- Dos entradas para el teleférico San Jacinto.
- Una Gillette oxidada.
- Un boleto a Miami ida y vuelta vía Pan Am. (o Braniff).
- Una membresía del Club Salinitas.
- Un cupón de regalo válido solo para Simán Centro.
- Una camisa rosada del bravo y valiente General Munguía Payés
- Una película en Betamax.
- Certificados de compras por 250 colones en la Tapachulteca.
- Un anuncio comercial full color en La Noticia.
- Un pase para ver conciertos en El Poliedro.
- Un certificado de regalo para ser canjeado en almacenes Kismet.
- Tiquetes para divertir a sus niños en “El Mundo Feliz”
Cualquiera de estos productos, nos sería inmensamente más útil que el promontorio de criadores de cebo ofertados.
Y si usted no tiene ninguno de estos artículos, no importa, lléveselos igual.
Dirigir sus ofertas a Caja 69 – 96 de este blog.
Firma: El Pueblo.
Y entonces … todos en las sociedades previas al siglo IV a. C tenían los dientes amarillos? Los amantes se daban besos apasionados en medio de nubes de halitosis? De donde nacieron los accesorios para la limpieza dental ?
Pepe Parásito, pajarraco pterodáctilo, sanguijuela del neoclásico, huele a mierda y hiede a plástico, te sangra a lo jurásico, te pone trabas y mil obstáculos, te ahorca con tentáculos, pero al Jefe le da un ósculo, en el sitio más recóndito, cada día al crepúsculo …
Éramos independientes, libres, tan libres que ni vestirnos necesitábamos, porque nadie había venido a decirnos que nuestras partes pudendas, eran nuestras vergüenzas ….