
Tú eres la gloria deseada
lo bello, intangible, distante
tú eres mi sueño presente
Yo soy tu portero suplente ...
Él es quien te abraza y te besa
la eterna presencia constante
Él es tu pasión inclemente
Yo soy tu portero suplente.
Yo lleno tu vida de flores
de historias de nunca olvidarte
Yo lleno de sueños mi mente
pero sigo siendo tu portero suplente.
El quita tu ropa furioso
te afloja vestido y tirantes
Él es quien conmueve tu vientre
yo soy tu portero suplente.
Él te ama y se vuelve rutina
porque sabe que siempre lo esperas anhelante
yo que diera por tan solo acariciarte
pero sigo siendo tu portero alternante ...
Hasta que un día en el cielo estallan tormentas
entonces corres a mi consejo
reparo todo dolor, toda lágrima,
para que a sus brazos regreses
y tu no reparas en mi
poco a poco se consumen horas, días y meses
y ante tu indiferencia constante
sigo siendo tu portero suplente.
Yo recojo migajas de ternura
Una palabra, llamada, un instante
mientras tu te entregas a Él totalmente
Y te aguardo... soy tu portero suplente.
Pero un día habrá de ser
que tus ojos puedan despertar
Y aquel que siempre fue tu portero suplente
se convertirá en portero titular ...
Si me van a acusar de loco, derechito al manicero mejor ! Nunca he sido persona de ir al psiquiatra. A la fecha, había logrado el precario equilibrio de mi cerebro con lo que tengo a mano: en una época cambiaba de novia semanalmente como James Bond; en otra, tomaba una que otra anfetamina, como Funes, y quedé incapaz de amarrarme los zapatos; en una, no muy lejana, abusaba de los Doritos, como doña Milagro Navas.
Quiero escribir sin pretender tirármelas de santo o profeta, si se me permite, de un concepto totalmente vital, que tendemos a dejar caer en el olvido... es una sola palabra que encierra dos mil actitudes...

Hace 50 y pocos años, al comenzar la década, vivíamos en un país próspero, aun inocente, manso y tranquilo aunque no lo sería por mucho tiempo más …