El Carrusel es el mismo, gira sobre el mismo eje, los cisnes encantados, los caballitos, las calesas, los unicornios y los patos son los mismos, están viejos y cascoteados, el dueño ha cambiado alguno por alguno nuevo  ….

… pero el Carrusel es el mismo y gira sobre el mismo eje, los 360 grados de visión, son exactamente los mismos, el paisaje es el mismo y vamos a ver lo mismo, una y otra vez …

Los niños se suben al Carrusel y después de dos, tres vueltas, ya lo vieron todo y por muy niños que sean, por muy ingenuos que el dueño nos considere, por mucho que crea que nos puede manipular, con un Robocop o un par de Mario Bros nuevos entre los Dumbos y el Mickey que ya están bastante astillados, nada va a cambiar, reina la nausea y la apatía …

… entonces para que te vas a subir al Carrusel otra vez? De que te vas a reir si los payasos son los mismos que cuentan los mismos chistes?

La apatía y la grieta

La apatía ante la inoperancia de nuestra clase política es la que reina, los mismos líderes de opinión pública se debaten ya no en votar por “x” o por “y”, sino en ir o no ir a votar … o en todo caso, votar pero anular el voto … los “politólogos” de redes sociales se afanan en decir que si no votamos, o votamos en blanco, permitimos que el voto duro de cada partido decida los destinos del país … sin darse cuenta que hace más de cinco elecciones que los votos duros de cada bando deciden y hacen lo que quieren con los resultados electorales.

El Carrusel es el mismo, mesas fraudulentas, trasiego de votos, el voto cruzado que intentamos, pero ningún sistema informático procesa … lo mismo, después de lo mismo …

Y en marzo hace calor, y es ideal mejor estar en casa con la TV y ventilador o en la playa … es mas, nos enojamos porque ese domingo de elecciones no hay fútbol … pero el cable, gracias a San Havelange, todavía pasa algún partido internacional interesante en medio de tanta chanchada de fútbol mexicano.

Y en un rincón remoto de los tantos vericuetos que tiene el universo de las probables tres elecciones en un año (municipales y legislativas, Presidenciales y probables segunda vuelta) yace herida de muerte … la Democracia.

Sra. Democracia e hijos

Si a la hora de pensar la política tuviéramos en cuenta este concepto básico existencial, entonces sería mucho más llevadero el hecho de cruzarte un par de observaciones ideológicas, con un adversario, al otro lado de la grieta.

Al lado de cualquier drama existencial, este atropello delictivo y autoritario, de creer que nuestra idea, es la única que prevalece, tan poco propio de la Democracia,  es un sólo un simpático contratiempo cotidiano. Sin embargo, vivimos enloquecidos por cosas como estas discusiones y no podemos parar para pensar en nuestro pobre país tirado al basurero, al “shithole” de Trump.

En realidad, la famosa apatía de la que tanto nos quejamos y no podemos salir, hace un magnífico aporte a la negación de los verdaderos conflictos de la condición humana, echarle la culpa a otro, es un excelente deporte nacional y sirve para evadir toda responsabilidad.

Sin darnos cuenta, hemos puesto a la polarización, la grieta, por delante de todo y le hemos otorgado un rol trascendente. Nos mantiene vivos, fuertes, encendidos, alertas, entrenados, hirientes, puteando ... Pero por sobre todo nos mantiene bien idiotas, que es la manera más fácil de eludir la idea de la Democracia y sus afluentes. O sea, nos aleja de lo importante.

Si bien todavía la realidad política nos sigue dando razones para generar la apatía, pareciera ser que llegó el momento de ir bajando la dosis de tranquilizantes que habitualmente consumimos durante el “zapping” de los programas políticos televisivos.

Cómo terminar con la apatía que permite que se engorden y llenen de dinero los mismos caballos del Carrusel? Como lograrlo si es que realmente nos interesa dar vuelta la página, empezar a caminar hacia adelante y ocuparnos de lo importante … que la Patria avance y la Familia prevalezca?

La dichosa apatía no define a dos sectores enfrentados, sino que expone a un sector que manejó el Estado Nacional durante un par de décadas y persiguió al otro al que consideró un enemigo de la Patria, del pueblo, de la Democracia y de la defensa de los derechos humanos y el otro que tira pedradas de regreso …

Define lo hartos de ello que estamos los salvadoreños.

El Carrusel es el mismo y gira sobre el mismo eje …

Votar o no votar? Esa es la pregunta … dejar morir la Democracia? Esa no es ninguna repuesta.

Y a El Salvador compatriotas, o lo sacamos del hoyo entre todos o nos hundimos con él.