logo

frank frazetta swampdemon

“Desperté horrorizado; sudor frío cubría mi frente, mis dientes castañeaban y mis extremidades se retorcían cuando, a la luz pálida de la luna, vi el horrible, el miserable monstruo que había creado.”

Así describe el doctor Víctor Frankenstein, en la novela de Mary Shelley (1818) la aterradora criatura a la que da vida en su laboratorio. Tan bestial y monstruosa “que ni siquiera el Dante habría podido concebirla”.

La bestia negra y verde, monstruosa, agusanada, impávida, indolente, que desde los acuerdos de paz de 1992 creamos los Salvadoreños, omnímoda, descontrolada y autista (“monopolio de corrupción oprobioso y carente de garantías”- escribió un editorialista hace unos días ) nos tiene hoy a todos presas del pánico, como el doctor Frankenstein ante su engendro.

Por indolencia o por ignorancia, los Salvadoreños, con nuestros votos y vetos, nuestros celulares y celulitis, nuestros “ahí dejalos o no es problema mío”, hemos parido una clase política bestial, ignorante pero imponente, una institución de poderes tan amplios como vagos que, instrumentada por un fanatismo tan embebido en su misión de hacer política, pero más aún embebido en su misión de hacer dinero en base al dinero ajeno, ajeno logrado en base a la política, ajeno a sus funciones y embebido en distintos licores y drogas que consumen y transan …abren sus fauces y se devoran lo poco que queda del pueblo salvadoreño.

54723

No se puede expulsar de la vida pública a quien fue elegido por el pueblo, pero entonces vamos buscando cadenas, hay que amarrar a la bestia. Porque como pueblo somos votantes pero no somos vigilantes …

Si se trata de desterrar de la vida pública a quienes han cometido equivocaciones en el gobierno, la lista es interminable, se tendrían que ir todos …

Crear una locomotora sin freno es una barbaridad. Pero ponerla en manos de un maquinista irracional es un crimen. Pero lo hicimos, pusimos de maquinista a un ególatra, ladrón voraz y demagogo como todo populista; le siguió otro similar, que amén de las características del saliente, se le suma una inestabilidad psiquiátrica galopante y una inteligencia emocional casi nula. El Profe, vino a normalizar el esquema, pero haciendo muy poco, y dejando todo en manos de otros esbirros, otros tentáculos de la bestia negra y verde … esos son los peores.

Pero lo más grave de la actitud de la bestia, es que padece de una enfermedad y no quiere reconocerla. Porque si alguien es consciente de que tiene un mal y lo trata como corresponde, tarde o temprano lo va a resolver.

Violencia1

Pero si nuestra bestia agusanada, nuestra clase política de todos los colores, ojo, que aquí han fallado todos los partidos, a excepción de aquellos que aún no han detentado el poder … sigue negando su enfermedad, la esconde debajo de la alfombra, y esos problemas se multiplican y crecen como una bola de nieve. Hace poco, uno de los salvadoreños que más sabe de movimientos y partidos políticos y su historia me decía:

“Antes, nuestra clase política robaba menos, porque había menos; ahora es peor, roban y despilfarran más habiendo aún menos que antes … o sea, dilapidan el dinero con el que endeudan a las venideras tres generaciones de compatriotas ….”

Hay que amarrar la bestia, es imperante, necesario …

las cadenas son los votos que debemos de emitir el domingo …

por quien usted crea y le convenga.

Pero ojo, encadene a la bestia al no permitirle

perpetuarse

invisibilizarse

lucrarse

del dinero con el que nos sangran impositivamente.

Y a El Salvador compatriotas, o lo sacamos del hoyo entre todos, o nos hundimos con él.

Otros Posts

Pequeño Glosario Salvadoreño Ilustrado (Parte 2)

Cadenas para borrachos

Cantina: Dícese de aquel perrito tan fino que en lugar de bañarlo en el patio, lo bañan en la tina.

El que a buen árbol se arrima, si no lo ve nadie, se orina

istockphoto 1003381106 170667a

 

-         Sabés que no soporto de ustedes los hombres ? – me tiró a la cara con actitud de sentencia una buena amiga – no soporto que se “acomoden” en público …delante de nosotras …

 

Leyes de Murphy aplicadas al caos que vivimos

(“Inclusive el alcohotest tiene algo positivo”. Un optimista).

 

© Daniel Rucks 2024